jueves, 30 de diciembre de 2010

La rosa púrpura del Cairo



La rosa púrpura del Cairo(1985) dirigida por Woody Allen e interpretada por Mia Farrow como actriz principal (Cecilia), entre otros actores como Jeff Daniels, Danny Aiello o Dianne Wiest; está ambientada en el período de la depresión económica estadounidense.

Narra la vida de Cecilia, una camarera que se evade de su apesadumbrada existencia para deleitarse casi todos los días con la glamurosoa, fascinante, perfecta y romántica vida de los personajes de su película favorita La rosa púrpura del Cairo, hasta que un buen día, tras a ver visto la película varias veces, uno de los personajes se fija en ella y sale de la gran pantalla para vivir un romance.

Esta película nos habla de cómo las personas, en ocasiones, nos rendimos frente a un mundo ideal y sonador donde poder dejar atrás nuestras preocupaciones, relajarnos, escapando del mundo real y contentándonos con disfrutar de las experiencias ajenas reflejando en ellas nuestros anhelos; recordándonos también con esta reflexión al Mito de la caverna de Platón, en el que unos hombres desde niños estan atados en una cueva y para ellos sólo son reales las sombras que ven reflejadas en una pared. Podríamos encontrar un paralelismo entre Cecilia y el hombre de la cueva que escapa y ve la realidad del mundo exterior, solo que en el caso de ella, tras darse cuenta de que su amor la ha utilizado y la ha dejado plantada, vuelve a adentrase en su cueva (el cine) en busca de consuelo y protección ante lo conocido.

Círculo de Bellas artes. Horacio Coppola



Horacio Coppola, nació en 1906 en Buenos Aires (Argentina) dentro de una familia de origen italiano.

Comenzó a conocer la fotografía de la mano de su hermano mayor que poseía una cámara de gran formato.

En 1927 comenzó a fotografiar por su cuenta, siendo sus referencias en esa época los fotógrafos Nadar, Hill y Weston, todo su aprendizaje lo realiza de forma autodidacta.

Recorre Buenos Aires fotografiando la evolución de la ciudad, el contraste entre el antiguo y el nuevo Buenos Aires.

Al final de los años 20, viaja a Europa y conoce Alemania, Francia, España y en 1932 comienza su segundo viaje por Europa, donde a demás visita Londres.

Esta obra se encuentra en ese momento social y la han divididos en cuatro partes: Brasil, Paris, Londres y Berlín.

En Brasil, el autor se revela como fotógrafo de vanguardia , adelantado a su época y predominan retratos sociales y espacios abiertos y despoblados.



En Berlín, las fotografías tienen un toque político izquierdista, con el que simpatizaba el autor, y en este periodo el paisaje, las formas dentro de el , será lo mas fotografiados por el autor.



En su viaje a París, el ecosistema urbano sigue siendo el motivo principal d su fotografía pero surgen nuevos temas propuestos, y entre ellos el lenguaje de los muros, los primeros graffitis fotografiados por Horacio, la mancha en el muro, tan personal y característica, tan íntima y su significado en el tiempo.







Finalmente, Londres es el sitio donde Horacio se inclino por retratar a todas las personas indigentes, transeúntes y vagabundos que viven en las calles. Deja más de lado los paisajes urbanos despoblados, para centrarse en una critica social.



El Madrid de Santos Yubero

Martín Santos Yubero (Madrid-1903-1994) es una de las figuras más importantes del fotoperiodismo español. Sus primeros reportajes le sirvieron para formar parte de la redacción de La Nación. Colaboró en medios de distinta tendencia ideológica, desde Ahora, hasta ABC, Estampa, La Tierra, Ya o el diario Luz.

En 1933, se unió al recién creado Diario de Madrid. En aquel mismo año comenzó a combinar el uso de su cámara de gran formato, con una Contax de 35 mm. En 1935, Vicente Gállego le llamó para hacerse cargo del servicio gráfico del diario Ya. Cuando se inició la Guerra Civil, el diario Ya fue incautado y volvió a sus viejas cámaras de placas, con las que trabajó durante los años de la contienda, en sociedad con los hermanos Benítez Casaux.

Con ellos creó una agencia gráfica que enviaba sus fotografías a La Voz, La Libertad, Crónica y al diario ABC Republicano. Concluida la Guerra Civil, volvió a su antiguo trabajo en el diario Ya.



La exposición, Santos Yubero. Crónica gráfica de medio siglo de vida española 1925-1975, se encuentra en la sala Alcalá 31 de Madrid. Ha sido comisariada por Publio López Mondéjar y ofrece al público 160 fotografías divididas en dos ámbitos: España entre dos dictaduras y Los días del franquismo, además de mostrar un audiovisual y material de época como cámaras fotográficas y publicaciones en las que se encuentra la obra de Santos Yubero.

Su obra con medio millón de fotografías forma parte del Archivo Regional de la Comunidad de Madrid gracias a la donación de su viuda y su hija. Los negativos utilizados para realizar esta muestra han sido positivados en los talleres de Castro Prieto.



La exposición tiene un gran interés histórico pero sirve también para descubrir a un experto fotógrafo, que muestra de una forma muy sensible una época difícil y de muchos cambios, sacándole el mayor partido a su profesión, registrando con sus cámaras miles de escenas de la vida cotidiana de Madrid, la política, la cultura, la farándula, el deporte, la represión en las cárceles de la guerra y la posguerra, el mundo taurino, etc.







Una exposición más que recomendada que podrá ser visitada gratuitamente hasta el 16 de Enero de 2011.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Rafael Lozano-Hemmer





Este artista nacido en Ciudad de Méjico (1967), estudió Física en la Universidad Concordia en Montreal, Canadá. Actualmente divide su tiempo entre Madrid y Montreal.

Conocido por sus intervenciones interactivas en espacios públicos de gran parte del mundo, Lozano utiliza en sus instalaciones tecnologías la robótica, proyecciones, sensores y redes de comunicación con plataformas para la participación.

Este artista aclara que se divierte jugando con la frontera entre lo artístico y lo tecnológico y sus obras cobran verdadero sentido al hacer participe a la gente de éstas, dando un giro a la visión del arte tradicional en la que el espectador era totalmente ajeno a la obra, algo muy interesante a mi entender, ya que estamos en un momento artístico de exploración y búsqueda de nuevas formas de expresión que nos diferencien y puedan llegar al resto.

Entre algunas de sus pizas se encuentran:

El Rastro, "una instalación de tele-presencia", que se presentó por vez primera en ARCO en 1995 alcanzando un gran impacto. Habla de la transformación del espacio vital producida por las nuevas tecnologías, a través de la presencia insinuada, mediante rastros o huellas, de dos participantes en sitios remotos que comparten un mismo espacio telemático.



Emperadores desplazados, presentada en el Festival de Arte Electrónico de Linz en 1997, transformaba virtualmente la fachada de un castillo de la ciudad austríaca y establecía un juego virtual de desplazamientos que implicaba al emperador Maximiliano de Austria y el emperador azteca Moctezuma.



La tercera pieza en esa serie de "arquitectura relacional": RePosición del Miedo, presentada en noviembre de 1997 en otra ciudad de Austria, en Graz, transforma virtualmente la fachada de uno de los más grandes arsenales militares de Europa, con proyecciones a gran escala de las sombras de los espectadores. La intención primordial, en este caso, es mostrar plásticamente las transformaciones históricas del miedo, que en las pinturas históricas del interior del edificio se representaba en la plaga de langostas, la peste negra y la amenaza turca. Como es sabido, los turcos nunca llegaron a entrar en Graz. Las sombras son una metáfora de la amenaza.



Alzado vectorial, una instalación interactiva de gran escala, presentada entre el 26 de diciembre de 1999 y el 7 de enero de 2000 en la Plaza del Zócalo de Ciudad de México y a través de Internet, la cuarta pieza de "Arquitectura relacional", pretende transformar ese espacio emblemático de Ciudad de México, crisol histórico de las distintas civilizaciones que dominaron en el gran país americano.
En este caso se utilizaron dieciocho cañones antiaéreos robóticos, dispuestos en la Plaza, que los internautas podían manipular desde la página del proyecto, elaborando dibujos geométricos virtuales que se trazaban luego realmente en las fachadas de los edificios y en el cielo. Se produjeron 800.000 visitas virtuales de todo México y de 53 países, y los dibujos virtuales/reales, que Rafael Lozano-Hemmer prefiere llamar "esculturas de luz", pudieron ser vistos tanto en la red como en un radio de 10 Km. en torno a la Plaza del Zócalo.





(La información acerca de las instalaciones la saqué del siguiente enlace:http://www.elmundo.es/cultura/arteXXI/lozano-hemmer/criticalozano.html)